Iluminación indirecta en la habitación del hotel. ¿Para qué?

La iluminación en las habitaciones de los hoteles es muy importante y, por este motivo, se convierte en una de las herramientas que se tienen muy en cuenta para la decoración. Esta tiene la capacidad de provocar diferentes ambientes y también sensaciones en los huéspedes. La iluminación, sea directa o indirecta, tiene un papel funcional y un objetivo concreto en cada caso.

Pero hoy nos centraremos en la iluminación indirecta. En los hoteles, lo más habitual es encontrarla en los mostradores de recepción. Mientras que la recepcionista dispone de una luz directa para trabajar, el hall presenta un ambiente mucho más distendido. ¿Cómo? Con este efecto de la iluminación indirecta, que ahora también se tiene muy presente a la hora de diseñar las habitaciones de los hoteles.

Ya sea por ocio o por trabajo, las habitaciones deben estar bien equipadas y la luz debe conseguir que la estancia sea agradable y que el usuario se sienta a gusto. Con la iluminación indirecta se puede conseguir que la estancia sea mucho más satisfactoria. Como comentábamos en el artículo anterior, es primordial tener en cuenta la experiencia del usuario en cada detalle.

La iluminación indirecta se puede encontrar en luces empotrables o proyectores de carril. Lo que hace esta luz es dirigirse a zonas concretas o elementos que se quieren resaltar de la decoración, como pueden ser el techo o el mobiliario, consiguiendo un ambiente totalmente cálido.

Beneficios de la iluminación indirecta

– Evita que se cargue demasiado la vista

– Ambiente mucho más relajado

– Aumenta la sensación de amplitud

 

La decoración es la forma de transmitir al cliente comodidad, por ejemplo, a través de la iluminación. Y aunque quizás sea uno de los aspectos más olvidados, tiene mucho protagonismo en la decoración de habitaciones de hoteles. Por eso, a la hora de planificar un nuevo proyecto contract siempre tenemos en cuenta los efectos de la iluminación indirecta, partiendo del estilo del hotel: clásico, rural, moderno, minimalista, zen, etc.

Sin olvidar la luz directa, indispensable para desarrollar algunas actividades concretas, lo más importante es tener en cuenta la postura del usuario y facilitar espacios con luz indirecta cuando sea conveniente. Al final, es la comodidad del huésped la que determinará cual ha sido su experiencia en el hotel. Por lo tanto, debemos pensar en la persona que estará allí y en sus necesidades, para que su experiencia sea satisfactoria. Eso sí, ¡sin olvidar la decoración!