El armario forma una parte esencial de un dormitorio y es indispensable en un interiorismo. Va mucho más allá de un cubículo en el que almacenar prendas y otros muchos objetos. Es una gran herramienta de organización y facilita las rutinas del día a día. Si una cosa es cierta es que los accesorios son las piezas que más se desordenan y han de tener un sitio reservado. Solo así, mantendremos el orden y ahorraremos tiempo en encontrar y escoger lo qué queremos utilizar.

Cuando trasladamos el concepto de armario a uno de uso masivo, como es el caso del de un equipamiento hotelero, hay un amplio abanico de opciones innovadoras. El sector del contract no abandona jamás la simplicidad como rasgo habitual, aunque con el tiempo se ha valido de la creatividad para generar ideas que marquen la diferencia y así satisfacer las necesidades del huésped.

Aquellos viajeros que se mueven por trabajo o aquellos que realizan una estancia de vacaciones prolongada, quieren sentirse cómo en casa y optan por llenar cada uno de los compartimentos del armario de su hotel. Los/as hay muy concienzudos/as, con lo que sorprenderles con un diseño de armario perfecto es tarea obligada.

Algunas de las estructuras más útiles para un armario son las barras y los cajones. El máximo número de barras posible hará que más ropa pueda ir colgada y así no se arrugue. Además, también permite ver mejor todo su interior. El reto es que sin estresarse, el cliente pueda elegir y organizar en el menor tiempo posible. En este sentido, dependiendo de la estación, también nos será adecuado disponer de cierta cantidad por si hubiera que colocar prendas más voluminosas: ropa de abrigo o jerséis.

Los organizadores de zapatos, otros elementos que también generan cierto desorden, también son muy beneficiosos en caso de tener que almacenar un número considerable. Especialmente si los hay deportivos y de fiesta. Poder separarlos entre sí –dentro del armario – ofrece  comodidad. Para maletines o bolsos, también hay opciones de lo más creativas para poder ponerlo todo en su sitio, según tamaños. Algo tan fácil como colgadores en el interior de la puerta del armario pueden solucionar el misterio. Las baldas pueden ser otra opción y, en última instancia colgadores, en el mismo perchero.

Por otro lado, los armarios también existen más allá del dormitorio en otras dependencias del hotel, como la zona de recepción. La cuestión es que cada uno de los estantes o compartimentos tengan un objeto asignado.

El universo de las cómodas no se queda tampoco atrás y puede ejercer de complemento para nuestro armario. En este sentido y según la temporada, pueden venir muy bien los separadores interiores, dispuestos en el cajón.